Las Barrancas de Burujón es un monumento natural que conforma uno de los paisajes más espectaculares de Toledo y de los más sorprendentes de España. En plena meseta castellana las aguas del Tajo, el viento y la lluvia han esculpido gargantas y cárcavas sobre sedimentos miocénicos de arcilla.
A sus pies, las aguas del embalse de Castrejón acogen una nutrida diversidad de avifauna que le ha valido la declaración de ZEPA (Zona de Especial Protección de Aves) y de LIC (Lugar de interés Comunitario).
INTERÉS FOTOGRÁFICO
El paisaje de las Barrancas va variando a lo largo del año y cualquier época es buena para visitarlas y obtener espectaculares capturas, aunque si lo que se busca es fotografiar la vía láctea, el centro galáctico solo es visible durante primavera y verano. Y es que, a pesar de estar a escasos 30 km de Toledo y no estar exentas de contaminación lumínica, se puede obtener imágenes nocturnas aceptables de la vía láctea como podrás apreciar a continuación. La espectacularidad del paisaje , la diversidad de fauna y la aceptable calidad del cielo nocturno merecen la consideración de lugar de interés fotográfico.
Si hacemos el recorrido durante el crepúsculo , el rojo de las Barrancas y los colores cálidos de la hora dorada tiñendo el cielo y reflejándose en el agua del embalse, componen un paisaje impresionante , imposible de resistirse a fotografiarlo.
LA VISITA
Aunque la visita puede realizarse en cualquier momento del año, en verano hace mucho calor, así es que lo recomendable es visitarlas a primera hora de la mañana o última hora de la tarde. El resto del año lo mejor es hacer un día completo, para visitar también el embalse de Castrejón, observar y/o fotografiar fauna y deleitarse con la impresionante vista del embalse con las Barrancas como telón de fondo.
En el carrizal observaremos especies como el calamón, aguilucho lagunero, garza imperial y real, avetorillo, martinete,etc
En la lámina de agua observaremos, cucharas, colorados, azulones, ánsares, zampullines, somormujos, etc.
Cuando el sol se encuentre en el horizonte es el mejor momento de acercarse a las Barrancas. Una vez que abandonamos la carretera CM-4000, nos adentramos en un camino de tierra (señalizado) que, aunque no está en buen estado, es transitable por cualquier turismo. Cuando lleguemos al primer mirador, aunque se puede seguir el recorrido a vehículo, es mejor dejarlo aparcado y hacer el recorrido a pie a lo largo de la senda de 1 km que rodea las Barrancas y dispone de varios miradores.
En este vídeo grabado desde un dron puedes disfrutarlas a vista de pájaro y admirar la belleza de este paraje.
FOTOGRAFÍA NOCTURNA EN LAS BARRANCAS DE BURUJÓN
Para los aficionados a la fotografía nocturna, el momento de fotografiar comienza durante el crepúsculo civil. Si no estás familiarizado con las fases del crepúsculo te aconsejo que veas «Entender la luz natural. La hora mágica»
A continuación voy a exponer como va cambiando la luz y los ajustes de cámara requeridos, ya que es necesario para la realización de estas imágenes y comprender el aspecto general de colores, ruido y definición de una fotografía nocturna. De los tres parámetros que conforman la exposición solo voy a poner el tiempo de exposición y el ISO, ya que la apertura de diafragma es de f/2.8 (máxima apertura para que entre el máximo de luz) en todas las fotografías
CREPUSCULO CIVIL
Durante el crepúsculo civil la luz es aún abundante aunque se van modificando los tonos de cálidos a fríos según pasamos de la hora dorada a la hora azul.
En esta imagen, capturada durante el crepúsculo civil, el EXIF es tiempo de exposición 1/15 segundos e ISO 200. Con este valor de ISO, aún bajo, no aparece ruido y el rango dinámico es alto, lo habitual en fotografía diurna.
CREPÚSCULO ASTRONÓMICO
Durante el crepúsculo astronómico la luz es ya muy escasa, para nosotros es de noche, ya son visibles la mayoría de las estrellas y nosotros ya no distinguimos los colores. Sin embargo, con estas condiciones de luz, las cámaras actuales captan imágenes sin ruido y con un aceptable rango dinámico.
En la imagen de arriba la exposición son 72 segundos y el ISO 2000. Vemos que he tenido que subir, ya mucho, ambos parámetros con respecto a la imagen anterior del crepúsculo civil. Aunque es un iso alto (casi 4 pasos de luz más que iso 200 de la foto anterior) y 72 segundos de exposición (8 pasos más de luz que los 1/15 s del crepúsculo civil de la anterior imagen) el nivel de definición es alto, conservándose aún bien los colores y detalles a pesar de que tenemos 12 veces menos luz. Eso sí, si te fijas las estrellas aparecen como trazas, no como puntos, debido al tiempo de exposición tan alto (con un objetivo 15 mm no conviene pasar de 30 segundos)
Las luces del horizonte no tienen nada que ver con el sol que ya hace mucho tiempo que se ocultó, son contaminación lumínica.
NOCHE TOTAL
Como podemos apreciar en esta imagen , la contaminación lumínica es patente en todo el horizonte, lo que no impide que se pueda ver el centro galáctico de la vía láctea.
Esta imagen vertical es una sola captura a ISO 6400 y 43 segundos de exposición, cuando ya ha finalizado el crepúsculo astronómico y ya es noche cerrada, que es cuando se hace visible la vía láctea. Si la comparamos con la foto anterior observamos que ha subido el ruido y es menor el rango dinámico. Tenemos menos definición y han desaparecido tonos, a pesar que se han subido las sombras en la edición y realizado ajustes para reducir el ruido. Es decir , subir el ISO no solo afecta al ruido sino también al rango dinámico. Por eso, lo habitual en imágenes nocturnas ,sobre todo si son panorámicas, es obtener cielo y suelo por separado.
EL ARCO DE LA VÍA LÁCTEA
Cuando salgo a fotografiar de noche normalmente el objetivo es obtener una sola imagen, como en esta ocasión, qu el objetivo es obtener el arco completo de la Vía Láctea sobre las Barrancas.
FLUJO DE TRABAJO
Previamente ya he planificado la foto, elegido la composición y el lugar exacto donde voy a situar la cámara. Ello exige la visita previa a la localización y saber exactamente a que hora estará la vía láctea colocada en el sitio que quiero. Para ello utilizo una app denominada Photopills.
TÉCNICA DE CAPTURA
Esta imagen resulta de la unión de 18 fotografías. Primero 9 fotografías verticales para el suelo realizadas al final del crepúsculo astronómico para no subir el ISO por encima de 2000 y tener un aceptable rango dinámico y no mucho ruido. Para que el suelo salga bien expuesto es necesario algo más de luz que la escasa luz zodiacal . Yo suelo fotografiar el suelo al final del crepúsculo astronómico. que, aunque parece que es noche total, queda luz suficiente para iluminar el suelo con una larga exposición. Después cuando la vía láctea está en el punto que quiero realizo otras 9 fotografías verticales que unidas me darán la panorámica del cielo. En estas fotografías el límite está en el tiempo de exposición que con el objetivo que utilizo, no puede superar los 30 segundos como ya he dicho.
EDICIÓN
Para la edición utilizo tres programas. Primeramente hago un revelado básico de las 18 fotografías con Ligthroom. Posteriormente obtengo por separado las panorámicas del cielo y el suelo con el editor de panorámicas Hugin. Después uno las dos panorámicas, cielo y suelo, con Photoshop y realizo una serie de ajustes sobre el ruido, la luminosidad y el color. Por último vuelvo de nuevo a Ligthroom para hacer los ajustes finales de revelado.
Puede parecer que con todo este proceso la imagen obtenida no representa la realidad. Es justo lo contrario, para obtener una representación fiel del paisaje tiramos de técnica para suplir las carencias de la misma, aunque parezca una paradoja. Cada nueva generación de cámaras va mejorando el comportamiento a ISOs altos y estoy seguro que, no en mucho tiempo, dispondremos de más libertad para la fotografía nocturna.
La imagen, por tanto, es el resultado final de un proceso de tres fases: planificación, realización y edición. Cada una de las fases exige unos conocimientos técnicos y necesita de unas herramientas, entrar en detalles supondría un tutorial de varias horas. Ahora vamos a centrarnos en la parte para mí más importante: la composición.
COMPOSICIÓN
La composición, los elementos y su distribución dentro del encuadre, forma parte de la fase de planificación y es la que más influye en el resultado final. Es lo que determinará, además, la localización exacta y la hora en que se realizarán las fotografías.
Si no conoces el significado de las líneas en composición te sugiero que veas la categoría Lenguaje visual y Composición, en este blog.
Lo primero que llama la atención en la imagen es la formación de una elipse entre las Barrancas y la vía láctea. Ya conoces lo que transmiten las líneas curvas cerradas en cuanto a dinamismo y enfatización de los elementos que encierran.
Todas las líneas convergen en un punto, que es el punto de fuga, en este caso una luz que son las farolas de la presa del embalse. También determinan el centro de interés de la imagen, representado por una elipse, que engloba la presa y el centro galáctico.
Rodeados con círculos destacan dos puntos dentro de la imagen. Uno es el planeta Júpiter, en el centro de la imagen, un punto luminoso que llama poderosamente la atención, pero que al estar centrado no afecta al equilibrio visual de la imagen. El otro es una atocha de esparto situada en el ángulo inferior izquierdo. Funciona como un punto de gran tamaño que equilibra el exceso de peso visual que produce el centro de interés de la presa y el centro galáctico en el lado contrario.
COLOR
Por último hay que destacar otro elemento fundamental en la composición: el color. En esta imagen la armonía del color se produce por la confluencia de cuatro tonos: naranja, verde, azul y magenta conformando una tétrada de dos complementarios, naranja-azul y verde-magenta.
El color magenta del cielo, que irradia desde Júpiter, no es contaminación lumínica, ya que ésta siempre está pegada al suelo, donde se encuentran las fuentes de luz artificial. Es un fenómeno de quimioluminiscencia nocturna conocido como airglow que, algunas (pocas) veces, se capta en fotografía nocturna. Se debe a la reestructuración de los átomos ionizados por la radiación solar durante el día.
CONCLUSIÓN
La magia de la fotografía nocturna es la posibilidad de ver paisajes que no podemos ver de otra manera. En la oscuridad no podemos ver colores. Las cámaras sin embargo si que pueden captarlos y registrarlos, tanto es así que se utilizan cámaras para la observación del cielo profundo en astronomía.
De noche vemos el cielo oscuro con puntos blancos que son las estrellas. Las fotografías, sin embargo, nos muestran que las estrellas y el propio cielo tienen colores. Si además hacemos panorámicas, podemos vislumbrar una amplia visión del terreno imposible de ver de otra manera y nos permite, por ejemplo, ver el arco completo de la vía láctea con su correspondiente porción de terreno
En la imagen de la izquierda aparece sombreada la parte del planeta en la que es noche. Cuando captamos el arco completo de la vía láctea esa es la porción de cielo que estamos captando, 180º en horizontal y 90º en vertical. Brutal e imposible de ver para nuestros ojos que, cuando observamos el cielo nocturno, tenemos que conformarnos con visiones parciales de dicho espectro.
4 comentarios
No tenía ni idea de que existiera un sitio tan bonito y tan cerca,claro que la magia de Juanra es evidente
Gracias Pilar. Las Barrancas son espectaculares y es cierto que la magia de la fotografía nocturna ayuda.
Me ha encantado no sabía que había sitios tan bonitos de verdad lo que nos perdemos.
Gracias Virginia, la verdad es que tenemos paisajes espectaculares. Cerca de San Pedro hay dos sitios parecidos a las barrancas de Burujón: los barrancos de Gebas y el desierto de Mahoya. Ambos los he fotografiado este agosto y publicaré dos entradas en breve sobre los mismos.